La BMW R Nine T es una moto con mucha presencia. Con un diseño sencillo, reducido casi a lo más básico, esta roadster clásica encarna la pasión, la comodidad y la elegancia y las combina con unos acabados muy cuidados.
En el uso diario, la R Ninte T es cómoda y divertida. Cuando vas al trabajo en ocasiones te sientes tentado por tomar caminos algo más largos para disfrutar y estar un poco más tiempo a lomos de esta máquina casi perfecta.
Cuando hay tráfico la moto te sitúa en una línea de visión que te permite vigilar todo lo que sucede a tu alrededor y a pesar de que los cilindros colocados horizontalmente son algo más anchos, no suponen un obstáculo para poder ser ágil a la hora de sortear el resto de los vehículos y el movimiento entre los carriles.
Pero es durante el fin de semana cuando la BMW R Nine T sorprende a sus usuarios. Escapar de la rutina diaria y disponer de la oportunidad de diseñar un viaje diferente es algo al alcance de una motocicleta que alcanza sin esfuerzo los 100 kilómetros / hora gracias a la potencia que proporciona el par de torsión mejorado.
Materiales de calidad y aspecto artesanal.
Las posibilidades de personalización que permite la BMW R Nine T es otro de los aspectos que mejor definen a una motocicleta pensada para los amantes de la customización.
La marca ha utilizado en este modelo materiales desarrollados durante los úitmos 90 años de historia de la división de motocicletas de BMW. Esas horquillas doradas que nos recuerdan a la S1000RR, un sistema ABS que se ha mejorado desde su aparición en 1988, el sistema de transmisión de la R1200GS, así como los frenos Brembo refrigerados por agua, son solo algunos elementos de una lista interminable de componentes que hacen de la R Nine T una moto realmente atractiva e interesante.
Un diseño sencillo y elegante.
Alejar esta moto de los sofistados conceptos que definen a muchos de sus competidores en la actualidad es un logro que BMW ha alcanzado gracias a la sencillez que ha sabido plasmar en un modelo que sin duda representa lo más puro del estilo de conducción sencillo conectado a una máquina fabricada para resolver con maestría la operativa para la que ha sido concebida.
Dotar a la BMW R Nine T de todo lo fundamental para, a partir de ahí, poder personalizar los detalles que mejor se adapten a nuestras expectativas es otra de las razones por las que se ha querido presentar un diseño reducido a lo puramente esencial. Así que, partiendo de un de un estilo clásico ya de por sí espectacular, esta BMW R puede presumir de otorgar a sus propietarios la ventaja de poder presumir de una moto única e inconfundible.
Toques sutiles como las costuras del asiento o la pintura en negro brillante conceden a esta motocicleta un acabado al que realmente nos tiene acostumbrados BMW. Además, con el paquete de accesorios “Classic” podremos dotar a la máquina de un elegancia con la que causaremos una primera impresión que perdurará en el tiempo.
Disfuta de la potencia de la R Nine T.
El motor boxer de dos cilindros que equipa la BMW R Nine T ofrece 109 CV en los 1.170 cc de cilindrada y gracias a su excelente rendimiento y a su par torsión se mueve mucho mejor entre las 4.000 y las 6.000 revoluciones.
Además, según indica BMW, la R Nine T cumple con las cinco normas europeas sobre emisiones.
