Jurassic Park irrumpió en la gran pantalla hace treinta años y se convirtió casi de forma instantánea en todo un clásico. Aclamada por niños y adultos por igual fue la película más taquillera de todos los tiempos hasta que Titanic de James Cameron ocupó el primer puesto cuatro años después. Su director, Steven Spielberg, el guión, el escenario, la banda sonora de John Williams, el elenco de estrellas y los propios dinosaurios hicieron de Parque Jurásico una historia inolvidable.
La historia es realmente atractiva, ya que John Hammond (Richard Attenborough), ha construido un parque zoológico diferente. Sus habitantes son auténticos dinosaurios. Después de un incidente en uno de los hábitats del parque, Hammond necesita que se verifique la seguridad de todo el recinto. Entonces, antes de su gran inauguración pública, invita a reputados expertos como el Dr. Alan Grant (Sam Neill), la Dra. Ellie Sattler (Laura Dern) y el Dr. Ian Malcolm (Jeff Goldblum) a echar un vistazo a la instalación y a verificar la viabilidad de la misma. Sin embargo, y casi de inmediato, las cosas empiezan a ir mal. Y es que pronto se demostrará que tienes el mismo poder de control sobre un Tiranosaurio Rex que sobre un poderoso huracán.
Elegir al querido Richard Attenborough como John Hammond fue, en mi modesta opinión, una elección acertada. Hammond es un hombre aparentemente apasionado por promover la ciencia y es fácil creer que este es su único objetivo cuando miras el rostro amable y abierto del icónico actor. A medida que se desarrolla la historia, queda claro que Hammond está más obsesionado que apasionado, hasta el punto de arriesgar la vida de sus propios nietos. Su poderoso ego y la idea de construir su propio legado hace que no sea plenamente consciente de los graves errores que está a punto de cometer.
Los tres expertos, los doctores Grant, Sattler y Malcolm, son la fuerza motriz de la trama. Su asombro infantil refleja nuestras mismas reacciones. Las interacciones de Grant con los niños (Ariana Richards y Joseph Mazzello), es de donde proviene gran parte del contenido de humor de la película, y la completa incredulidad de Malcolm ante lo que está sucediendo es la inyección de escepticismo que empuja a Hammond y a los científicos a tomar decisiones realmente ridículas. Ellie Sattler es un icono. Látigo inteligente, defendiendo el feminismo, luciendo botas de montaña y dispuesta a meterse hasta los codos en los excrementos de triceratops en busca de respuestas. Todo un icono, sin duda.
Parque Jurásico no es una película sobre dinosaurios. Es una película sobre la arrogancia humana, sobre la necesidad de nuestra especie de conquistar y controlar. Se trata de una exposición sobre la determinación y la humildad frente al error humano. El asombroso poder de la naturaleza gana, ya que todo lo que los humanos pueden hacer es retirarse apresuradamente hacia la puesta de sol para evitar ser devorados por su propia estupidez.
Por lo que respecta a los enormes protagonistas, si bien el T-Rex es un enemigo formidable y el logotipo icónico de la franquicia, los velocirraptores también son dignos adversarios para este equipo de valientes e inconscientes personajes humanos. El director Steven Spielberg y el autor del libro Michael Crichton no estaban tan interesados en una descripción precisa de un velociraptor, sino más bien en presentar una versión cultural de unos animales que seguramente poseían un instinto mucho más básico del que se describe en la película.
Dado lo icónicas que siguen siendo estas criaturas después de tres décadas, sigue siendo digno de mención reconocer cómo los dinosaurios solo aparecen en la pantalla durante catorce minutos de las más de dos horas que dura Jurassic Park. Esta es una técnica de construcción de suspense que el director Steven Spielberg perfeccionó en Tiburón. En Parque Jurásico tienes la sensación en todo momento de que los dinosaurios siempre están al acecho fuera de la pantalla, lo que añade un nivel de suspense y tensión que se convierte en terror cuando estos animales invaden el centro del escenario.
Parque Jurásico convenció a una generación de espectadores de que podían explicar la teoría del caos con una gota de agua y confiados de que, si se quedaban completamente quietos, nunca serían devorados por un T-Rex.
Las secuelas de Jurassic Park carecen de la magia del original, ya que el efecto sorpresa llegó con una primera película que sacudió los cimientos del cine explorando una nueva dimensión que desde un punto de vista tecnológico, pero sobre todo, narrativo, nos introdujo de lleno en la investigación biológica, en el amor por la naturaleza y en el respeto por un entorno que jamás podremos controlar.
GenexiGente opina sobre Parque Jurásico
Valoración GenexiGente - 8.5
8.5
Jurassic Park irrumpió en la gran pantalla hace treinta años y se convirtió casi de forma instantánea en todo un clásico del cine.
