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And Just Like That, la NO secuela de Sexo en Nueva York.

La nueva serie de HBO Max invita a muchos a rememorar aquel Sexo en Nueva York de finales de los noventa pero nada más lejos de una realidad que nos trae una trama mucho más dramática y sombría.

“Y así, sin más, regresé caminando hasta casa…” No, no es exactamente un spoiler pero a pesar de que Carrie Bradshaw nos regala una expresión como la que acabo de mencionar, sin duda se trata de una frase muy significativa teniendo en cuenta el contexto en el que la protagonista la pronuncia.

Esta nueva serie de HBO Max llega acompañada de algunos acontecimientos que truncan el desenlace de una vida que debería transcurrir sin demasiados sobresaltos pero que a la postre justifican el hecho de tener que renunciar a determinados estereotipos para poder abordar las cuestiones que And Just Like That pretende desgranar. Hay grandes novedades, la mayoría no las esperas, y eso convierte a la serie en acreedora de nuestra atención.

Debo reconocer que en los primeros capítulos estaba buscando las referencias a Sexo en Nueva York en cada escena, en cada instante y frase que pronunciaban sus protagonistas, pero me temo que mi búsqueda fue en vano ya que en mi opinión no estamos ante una continuación de la conocida serie que arrasó entre 1998 y 2004, sino que más bien los personajes principales se enfrentan a nuevos retos que vienen a definir una identidad propia a una nueva serie de capítulos excesivamente cargados de una normalidad propia de la década del siglo XXI que nos está tocando vivir.

Su protagonista, Sarah Jessica Parker, a sus 55 años disfruta de un estatus que capítulo tras capítulo se tambalea con retos propios de alguien que se sabe fuera de contexto pero que de algún modo se muestra abierta a reconocer determinadas nuevas situaciones en un entorno cercano en el que sus amigas juegan un nuevo papel que saca de contexto lo que conocíamos hasta ahora de sus respectivos personajes.

Así que quienes esperan encontrar una continuación a Sexo en Nueva York, muy pronto, ya desde el primer capítulo, van a sentir que algo se desgarra en guión debidamente actualizado y cargado de estereotipos que poco o nada tienen que ver con esa jóvenes de finales de los 90 y principios de los 2.000 que tanto cautivaron a una generación de personas ávidas por encontrar frescura en un entorno tan disciplinado.

Ahora, en cambio, se abre una nueva etapa en la que se siguen abordando cuestiones candentes sin tapujos, con un estilo directo y sin adornos, quizá excesivamente directo y fuera de tono, pero que al fin y al cabo se debe a una etapa social que no deja lugar a dudas sobre determinados tabúes.


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El mundo no es el mismo y aunque el ADN de And Just Like That tenga su base en aquel lejano Sexo en Nueva York, la efervescencia de la serie original está en cierta medida ausente en una nueva saga mucho más seria y temperamental. La nueva serie no trata de ser divertida y no se esfuerza especialmente por arrancar momentos graciosos al quehacer cotidiano de sus protagonistas. En cambio, And Just Like That quiere formular las preguntas para poder dar con las respuestas correctas más allá de cuidar en exceso la forma en el que abordar determinadas situaciones incómodas o desgraciadas. Es desgarrador comprobar cómo sin tapujos retrata una realidad y la sirve tal cual sin aplicar filtros que en otro tiempo habrían estado más que justificados.

La narrativa es muy similar pero probablemente es lo único que encontremos en común con Sexo en Nueva York ya que en And Just Like That echamos de menos esa comedia romántica para toparnos de frente con un drama y un enfoque mucho más propio de quienes quieren llamar a la reflexión desde cada frase o línea de un guión cocinado a fuego lento tratando de otorgarle el sabor que debe desprender una nueva cita que tiene su epicentro en un momento social tan convulso.

Sex and the City era provocadora, creativa, agitaba sentimientos e incluso resultaba algo cursi en ocasiones y eso la convertía en una serie encantadora. Ahora, And Just Like That nos trae a una Charlotte distinta, resignada en cierto modo e incluso excesivamente comprensiva con temas que habrían escandalizado a aquella joven tan inocente y culturalmente cultivada. La nueva Miranda nos invita a sumergirnos en un nuevo mundo que poco o nada tiene que ver con su anterior vida allá por los 90. Carrie es probablemente la única que mantiene ese espíritu abierto y sosegado propio de alguien que ha escrito y reflexionado tanto a lo largo de su vida y que no teme encontrar nuevos retos a los que enfrentarse siempre y cuando tenga un modo de entregar sus reflexiones a una amplia audiencia. En Sexo en Nueva York era una columna en un periódico y ahora, con los nuevos tiempos acechando inexorablemente, And Just Like That nos presenta a una Bradshaw entregada a los podcast.

Cuando echas la vista atrás y vuelves a ver la serie Sexo en Nueva York, esa nueva perspectiva te ofrece un producto con el que eres quizá un poco más crítico porque tenía ciertos tintes frívolos, pero parece que con And Just Like That, los guionistas han querido retorcer el argumento presentándonos una trama más sombría, más seria y más dramática para probablemente renunciar a cualquier referencia que tratemos de identificar con respecto a la serie de finales de los noventa. Debo decir que ese esfuerzo por borrar cualquier referencia a Sex and the City ha sido un éxito y cualquiera que ahora se enfrente al visionado de la nueva serie de HBO Max se va a encontrar con algo bien diferente, mucho más sombrío y dramático.

Pero este cambio no es un error ya que creo que hay que otorgar a cada serie el lugar que merece teniendo en cuenta el contexto social y económico en el que se desarrolla la trama. La vida pasa y es irremediable así que hay que adaptarse, dejar que pase y que cada etapa disfrute de sus propias experiencias. Las viejas amigas son ahora mujeres maduras que asumen con naturalidad su papel en un contexto que marca cada paso que dan, cada frase que pronuncian y cada gesto o guiño que otorgan a esos nuevos acontecimientos que les toca vivir y, sobre todo, las nuevas vicisitudes que están por llegar.

Por otra parte, de todos es sabido ya que Kim Cattrall (Samantha), no está en esta nueva serie y aunque se alude a ella en momentos clave de determinados episodios, e incluso hace acto de presencia aunque sea por WhatsApp, la nueva serie necesitaba de un personaje sin pelos en la lengua y cargado de ese brío con el que la joven Samantha abordaba sus vicisitudes. Quizá, el nuevo personaje de Che Díaz es un intento por parte de los guionistas de And Just Like That de tratar de suplir esa arrogancia de Samantha, un papel interpretado por Sara Ramírez (Anatomía de grey), que aporta un cierto brío al espectáculo pero que no hará olvidar a una Cattrall que deslumbraba no sólo por sus comentarios y diálogos fuera de tono sino por su elegancia y su saber estar.

Hay otros nuevos personajes que se asientan en una serie que tampoco queremos desgranar del todo desde estas líneas ya que queremos dejar que los espectadores puedan interpretar por si mismos cómo y en qué medida puede llegar a triunfar And Just Like That en una nueva etapa cargada de diálogos intencionados que pretenden abrir de par en par las puertas de la reflexión de una generación que ahora mismo puede sentirse cerca de los cincuenta y con quienes estas tres amigas de toda la vida tratan de establecer una conexión a través de la cual puedan explicar todo lo que está aconteciendo en la sociedad actual.

GenexiGente opina sobre And Just Like That

Valoración GenexiGente - 5

5

Una serie que intenta no renunciar a la esencia de Sexo en Nueva York en un mundo que ahora ha cambiado profundamente. Sin embargo, no logra encajar de forma natural a personajes que reconocemos por su pasado pero con los que no terminamos de conectar en el presente.

Valoración de los lectores: 2.71 ( 6 votos)


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Juan Carlos Navarro

Fundador de la consultora de marketing MarketinLife lleva 14 años proporcionando servicios de consultoría tanto a nivel nacional como internacional. Interesado siempre en el intercambio de bienes y servicios de alto valor añadido, acumula más de 20 años de experiencia en el sector de Nuevas Tecnologías trabajando con grandes empresas y marcas ayudando en sus procesos de transformación digital.

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