TAG Heuer, pionero en la relojería de alta gama, ha lanzado el nuevo cronógrafo Monaco Split-Seconds, una pieza que encapsula la perfecta amalgama de tradición y vanguardia en el diseño de cronógrafos.
El modelo, disponible en ediciones azul y roja, no solo se distingue por su exquisita manufactura sino también por ser un emblema de la fusión entre herencia e innovación en el dominio de la Alta Relojería Avanzada.
El Monaco Split-Seconds de TAG Heuer se erige como una verdadera obra maestra en el ámbito horológico, diseñado para seducir a conocedores, coleccionistas y aficionados con su movimiento espectacular y un diseño visualmente impactante.
Un siglo de innovación en cronógrafos de fracción de segundo
El legado de TAG Heuer en la elaboración de cronógrafos de fracción de segundo se extiende a lo largo de más de un siglo, con sus raíces profundamente asentadas a principios del siglo XX. La marca ha sido vanguardista en la dominación de esta complicada función, con creaciones notables como el Mikrograph de 1916, que se convirtió en el estándar de cronometraje en los Juegos Olímpicos de los años 20 y 30 al ofrecer una precisión de 1/100 de segundo. Este impulso innovador se mantuvo con desarrollos posteriores como el Microsplit, que añadía la función ratrapante con la misma precisión.
En la década de 1960, los cronómetros Heuer se establecieron como indispensables en el mundo del automovilismo, destacando modelos como el 11.402 que medía tiempos con una exactitud de 1/10 de segundo. En 1989, la incorporación de un cronógrafo de cuarzo con función ratrapante catapultó la popularidad de TAG Heuer en el automovilismo, ganándose el favor de leyendas como Ayrton Senna y Michael Schumacher. Hoy, en 2024, TAG Heuer continúa esta legendaria serie con el Monaco Split-Seconds, una culminación de precisión y diseño.
Reinvención del Diseño en Relojería
Desde su introducción en 1969, el TAG Heuer Monaco ha desafiado las normas con su forma cuadrada, la corona a la izquierda y una caja que combina acabados cepillados y pulidos. Su diseño resistente al agua marcó un hito en la historia de la relojería. En el 55º aniversario de la colección, el nuevo Monaco Split-Seconds lleva la innovación un paso adelante con una arquitectura revisada y el uso de materiales como el titanio de grado 5, lo que lo convierte en una pieza ultraligera de apenas 85 gramos. Este diseño se enriquece con un juego de transparencias y materiales, combinando titanio y cristal de zafiro para ofrecer una pieza de estética revolucionaria y vanguardista.
Avance Temporal: Cronógrafo TAG Heuer Monaco Split-Seconds
En el núcleo del cronógrafo TAG Heuer Monaco Split-Seconds late el calibre TH81-00, un cronógrafo mecánico de fracción de segundo recién desarrollado. Fabricado integralmente en titanio, este movimiento representa uno de los cronógrafos automáticos más ligeros producidos por TAG Heuer, en colaboración con el renombrado Vaucher Manufacture Fleurier.
El calibre TH81-00 es una sinfonía de precisión que amalgama la maestría relojera suiza con la tecnología más avanzada. La función de fracción de segundo, conocida como “rattrapante” en francés, es una proeza de ingeniería que permite medir simultáneamente dos intervalos de tiempo diferentes, ofreciendo una funcionalidad superior a la de un cronógrafo estándar. Ideal para medir vueltas en circuitos de carreras o eventos múltiples, el Monaco Split-Seconds ofrece una precisión y una versatilidad excepcionales.
La concepción del cronógrafo Monaco Split-Seconds y del calibre TH81-00 constituye un testimonio del compromiso de TAG Heuer con la superación de los límites de precisión y complejidad, brindando una experiencia de cronometraje única y elegante.
La última adición a la colección está disponible en dos opciones cromáticas: una versión roja vibrante y deportiva, que refleja el espíritu competitivo de la Maison, y una azul clásica y atemporal, que homenajea los tonos originales del icónico Monaco.
El fondo de la caja, completamente realizado en cristal de zafiro, ofrece una visión clara del calibre TH81-00, brindando una experiencia visual cautivadora. Diseñado para simular una masa oscilante que parece flotar, este fondo de caja transparente resalta la arquitectura compleja y sofisticada del reloj.
La masa oscilante, adornada con el emblemático escudo de TAG Heuer, cuenta con un acabado cepillado y un llamativo degradado pintado a mano en rojo o azul, signos distintivos de los diseños más exclusivos de TAG Heuer.
El patrón de tablero de ajedrez en el puente central y el delicado puente del volante cepillado con biselados pulidos son meticulosamente elaborados a mano, demostrando el compromiso de la Maison con acabados de primera calidad. Las superficies pulidas a chorro de arena y los tornillos pulidos complementan la artesanía excepcional de los acabados del movimiento.
La esfera, también hecha de cristal de zafiro, no solo expone el delicado mecanismo subyacente sino que también asegura una legibilidad óptima para un cronometraje exacto.
TAG Heuer redefine una vez más los estándares de cronometraje con el cronógrafo Monaco Split-Seconds, a través de una fusión de arte relojero tradicional y avances tecnológicos. Este reloj no solo rinde tributo al legado histórico de la Maison en cronógrafos, sino que también representa la cúspide de la Alta Relojería de Vanguardia de TAG Heuer.
