Relojes y Joyas

Girard-Perregaux La Esmeralda, la reinterpretación de una leyenda.

La Esmeralda es el famoso y galardonado reloj de bolsillo fabricado para la Exposición Universal de 1889. Este legendario reloj de bolsillo hermanaba una extraordinaria precisión con las artes decorativas más exquisitas. Y, cómo la Manufactura celebra este año su 230 aniversario, ha revisado su emblemático reloj de 1889 y ha creado un reloj de pulsera como homenaje a su legado y como muestra del importante conocimiento que atesora.

Girard-Perregaux La Esmeralda

El nacimiento de una leyenda.

Girard-Perregaux La Esmeralda

Las Exposiciones Universales se organizaban en el siglo 19 para mostrar los últimos avances tecnológicos del momento. Participaban varios países y las muestras más meritorias eran galardonadas con premios, medallas y otras distinciones. Hubo varios países que organizaron estas exposiciones, pero entre los destinos especialmente populares para estas muestras se encontraba París, que celebró varias Exposiciones Universales en los años de 1855, 1867, 1878 y 1889.

Girard-Perregaux La Esmeralda

En 1860, Constant Girard, un brillante relojero que había pasado casi toda su vida en el campo de la cronometría, creó un cronómetro con tourbillon con tres puentes de alpaca. Unos años más tarde, en 1867, participó con su reloj en la competición del Observatorio de Neuchâtel, ganando el primer premio y estableciendo un récord que tardó muchos años en batirse. Un año, 1867, en el que su reloj también fue galardonado con una medalla en la Exposición Universal de París.

Girard-Perregaux La Esmeralda

La diferencia entre el premiado trabajo de Constant y el de sus pares era que él no se dedicaba en exclusiva a los detalles técnicos, sino que también ponía mucho empeño en refinar la arquitectura de sus movimientos. Los famosos tres puentes que empleaba en sus relojes no eran piezas meramente funcionales, sino elementos que debían ser visibles y resultar atractivos. Un enfoque que, con el tiempo, fue estilizando la silueta en forma de flecha de sus puentes y que acabó por ennoblecerlos, puesto que pasaron a fabricarse en oro y no en la alpaca de los puentes de los primeros relojes de bolsillo. Había nacido la leyenda.

Girard-Perregaux La Esmeralda

En 1889, Constant visitó de nuevo la Exposición Universal de París para presentar otro reloj. Fue entonces cuando el famoso relojero presentó su tourbillon con tres puentes de oro, un reloj de bolsillo alojado en una lujosa caja de oro rosa, con un diámetro de 56 mm y dotado de un escape de gatillo, con una caja grabada de forma muy elaborada por Fritz Kundert, reconocido artesano habitante de las «montañas de Neuchâtel». En septiembre de 1889, este diseño le valió la concesión de un diploma y una medalla de oro en la Exposición Universal. Tras el acto, se encargó la venta del reloj premiado al famoso comerciante de relojes y joyas Hauser, Ziwy & Co, que ya gestionaba las tiendas de «La Esmeralda» en París y México.

Girard-Perregaux La Esmeralda

El reloj, llamado finalmente «La Esmeralda», fue vendido a Porfirio Díaz, por entonces presidente de México (1830-1915). Años más tarde, en 1970, un descendiente del presidente ofreció a la Manufactura la oportunidad de comprar el reloj, y pudo así integrarlo en la colección del museo de la Casa.

Girard-Perregaux La Esmeralda

Aunque la Esmeralda era un reloj de bolsillo de una gran precisión, su encanto no se limitaba a su caja grabada y a sus puentes de oro. También contaba, por ejemplo, con una lujosa esfera de esmalte blanco gran feu. Y con unas agujas de la hora y de los minutos Poire Stuart con diseño de filigrana, tremendamente elegantes. Asimismo, su caja savonette, con una tapa contra el polvo con bisagras, mostraba un bello grabado con tres caballos. Y, sin embargo y a pesar de contar con extensos archivos, Girard-Perregaux no ha sido capaz de encontrar registro alguno respecto a los tres caballos mencionados. De hecho, los caballos han acabado por conocerse en la Casa como «el misterio equino».

La reinterpretación de la leyenda. Un atractivo eterno.

Este año en el que Girard-Perregaux celebra su 230o aniversario, la Manufactura se complace en presentar La Esmeralda Tourbillon «A Secret» Eternity Edition, un reloj que emplea el legendario savoir-faire relojero de la Casa en un muestrario de artes decorativas ejecutadas según los estándares más exigentes. Esta última creación es una reinterpretación del legendario reloj de bolsillo «La Esmeralda» de 1889, con referencias a muchos de sus extraordinarios adornos. Sin embargo, no se trata de una mera copia del modelo pasado, sino un verdadero homenaje al buen gusto del galardonado reloj de Constant Girard. Es un modelo que cumple a la perfección las expectativas de los clientes modernos, pero que también rinde homenaje a La Esmeralda tratando de captar su inagotable atractivo.

Girard-Perregaux La Esmeralda

Patrick Pruniaux, CEO de Girard-Perregaux, indica: «La Esmeralda es, sin duda, nuestro reloj más famoso y como guardián actual de la Casa, nunca olvido que nuestras leyendas deben ser tratadas con el respeto que se merecen. Este año la Manufactura celebra su 230 aniversario y queremos asegurarnos de que ese hito no pasa inadvertido. Ya hemos presentado varios relojes fabulosos, aunque La Esmeralda «A Secret» Eternity Edition es, sin duda alguna, nuestra creación más ambiciosa hasta la fecha. Es un modelo inspirado en nuestros vastos conocimientos de la Alta Relojería —de los tourbillones, en concreto— que incluye varias artes decorativas y que rinde homenaje a la historia de la Esmeralda, un reloj que continúa mostrando un atractivo sin igual».

Similar, pero distinto.

Girard-Perregaux La Esmeralda

Al igual que La Esmeralda de 1889, este modelo también incorpora tres puentes oro sobre la esfera. Sin embargo, en este modelo, Girard-Perregaux ha iluminado de nuevo lo invisible convirtiendo los caballos grabados de la caja posterior del modelo original en el motivo central del nuevo reloj. De hecho, en los extremos izquierdo y derecho del puente del barrilete y del puente del tourbillon aparecen dos caballos al galope grabados a mano. Cada puente aparece minuciosamente acabado con biselado cóncavo, pulido de espejo, flancos con traits-tirés horizontales y brazos redondeados. Para finalizar los tres puentes son necesarias más de 40 de trabajo de acabado y otras 50 horas más para completar el grabado adicional que puede encontrarse en el barrilete y en el tourbillon.

Girard-Perregaux La Esmeralda

La Esmeralda Tourbillon «A Secret» Eternity Edition homenajea el legado de la Manufactura utilizando muchas de sus técnicas históricas, aunque no por ello deja de incorporar la tecnología más vanguardista. Por ejemplo, la platina, con una forma complicada, se fabrica con una máquina CNC con tolerancias infinitesimales que hubieran sido inimaginables en el siglo 19. No obstante, una vez fresada, la platina se acaba según los estándares propios de la Alta Relojería, un ejemplo más de la maestría de Girard-Perregaux para combinar el savoir-faire más moderno con el conocimiento tradicional.

Girard-Perregaux La Esmeralda

La platina (por el lado del fondo) se ve embellecida con un nuevo tipo de acabado, una primicia en la industria, exclusiva de Girard-Perregaux. Algunos relojes de alta gama incorporan un borde biselado con un ángulo de 45° que cubre toda la superficie y el flanco, pero este modelo ofrece algo nuevo: el biselado cóncavo. Se trata de un acabado que implica la creación de un receso curvado entre la superficie y el flanco, lo que capta la luz de forma maravillosa en el punto en el que cambian las sombras.

Girard-Perregaux La Esmeralda

Asimismo, y como indica su propio nombre, el reloj lleva una tapa secreta. Esta tapa se abre al pulsar la corona, lo que permite vislumbrar su movimiento de cuerda automática, el calibre GP09600-1506. Tras la tapa secreta, la platina está dotada con un puente de trabajos de movimiento y una placa de marcado. Ambos están fabricados en oro rosa e incorporan traits-tirés y ángulos pulidos a mano, imitando así la forma de los conocidos puentes de oro. En puente de trabajos de movimiento lleva la inscripción «secret». El interior de la tapa secreta con bisagras va grabado a mano con varias inscripciones, aunque puede personalizarse si lo desea el cliente.

Girard-Perregaux La Esmeralda

Tanto el barrilete como la platina (por el lado de la esfera) se ven adornados con varios patrones guilloché, realizados con un torno de motor de rosa tradicional por un experimentado artesano. Estas máquinas se operan de forma manual y carecen de todo tipo de electrónica. En ellas, los expertos colocan la esfera, que va girando a una velocidad sostenida y, con la otra mano, presionan el cincel o la cuchilla contra ella para eliminar el material. El patrón aparece gracias al uso de varias rosettes. Se trata de una técnica cuyo dominio requiere años, ya que, para crear un patrón hermoso, el artesano debe asegurarse de que tanto la velocidad de rotación como la presión que aplican al cincel permanecen constantes.

Girard-Perregaux La Esmeralda

Las agujas de la hora y de los minutos, de tipo dauphine y fabricadas en oro rosa, recorren grácilmente la hermosa y compleja esfera. El reloj está provisto —más allá de sus tres emblemáticos puentes y de la ya mencionada esfera guilloché— de varios detalles más que harán las delicias de los puristas. El área central de la esfera y de la platina está rebajada, para acomodar el barrilete, la rueda central y la jaula del tourbillon. El barrilete, revestido de rodio y situado en la sección superior de la esfera, muestra un texto dorado grabado, en el que se homenajea el texto que podía encontrarse en el barrilete de La Esmeralda original, indicando que el modelo estaba patentado. Un microrrotor de oro blanco, situado tras el barrilete y fuera de vista, aporta energía al muelle principal con una intervención mínima por parte del usuario.

Girard-Perregaux La Esmeralda

En la parte inferior de la esfera se ubica la jaula en forma de lira del tourbillon, fabricada con la tecnología más vanguardista, compuesta por 78 componentes y que solo pesa 0,3 g. Gracias a esta masa tan baja, se reduce el consumo energético, lo que contribuye a la reserva de marcha de 50 horas que tiene el modelo. En la jaula del tourbillon también se ha colocado una aguja de acero azulado que funciona como segundero pequeño.

Grabado a mano.

Girard-Perregaux La Esmeralda

La caja de oro rosa del modelo se ha grabado a mano por completo, en un claro homenaje al diestro trabajo de Fritz Kundert, el artesano encargado de grabar La Esmeralda en el siglo 19 y a la dedicación y la maestría de los artesanos modernos de La Chaux-de-Fonds. El bisel, la banda de la caja, las asas y la hebilla están grabadas con un delicado motivo de hojas, mientras que la parte exterior de la tapa está adornada con un diseño acanalado. También pueden encontrarse grabados adicionales tanto en el exterior como en el interior de la tapa secreta.

Una belleza eterna.

Girard-Perregaux La Esmeralda

La Esmeralda Tourbillon «A Secret» Eternity Edition se presenta como parte de la serie Eternity Edition, que rinde homenaje a la eterna belleza del esmalte. La interpretación contemporánea de este modelo ha utilizado esta métier d’art de modo más atrevido que su antecesor histórico, puesto que el esmaltado —realizado en su totalidad en la propia Manufactura— también se ha aplicado a los laterales y las asas de la caja. El esmalte está compuesto de una mezcla de sílice, minio, potasa y sosa, que se muelen hasta formar un polvo al que se pueden añadir otros óxidos metálicos para obtener diferentes colores. Este polvo se aplica en la esfera que, más tarde se hornea a una temperatura de unos 800 °C. Un proceso que se repite de 5 a 10 veces hasta conseguir el brillante acabado que se busca. Para dominar el esmaltado grand feu, es necesaria una considerable experiencia, pero incluso si ese es el caso, siempre existe la posibilidad de que aparezcan grietas, burbujas de aire e imperfecciones en el color. Muchas esferas no pasan la prueba y deben descartarse. Sin embargo, su principal ventaja es que las esferas fabricadas mediante este prolongado proceso no presentan fallos y conservan su color para siempre, ofreciendo así una belleza muy duradera.

Girard-Perregaux La Esmeralda

En la parte posterior del reloj, en la parte trasera de la tapa secreta esmaltada en azul aparecen tres caballos — un detalle de nuevo inspirado por el modelo original La Esmeralda— sobre una decoración guilloché con efecto rayos de sol y con esmalte azul grand feu. Vuelven los caballos, aunque su origen continúe siendo un enigma o, tal y como se dice en la Manufactura, un «misterio equino».

Redacción

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